1. Elias
River Andrews.
Llámame Cenicienta. Soy la historia de la pobreza a la riqueza, la chica del parque de remolques se convierte en estrella de Hollywood. Y estoy a punto de
conseguir mis felices para siempre.
Eso es, hasta que entro a mi casa, tres horas antes de mi boda, para encontrar a mi novio estrella de rock metiendo su p***a en la garganta de mi hermana.
Con cámaras detrás de mí, filmando.
Estoy huyendo de todo el asunto humillante.
No estoy preparada para correr directamente a él, Elias Saint.Es completamente erróneo para mí, dañado, sucio, y exigente.
Pero en cuanto me toca, no puedo alejarme.
Elias Saint.
Algunas personas llevan sus heridas en el interior. Cada j***do paso que doy, me
recuerda la mía.
Perdí mi pierna en Afganistán. Desde entonces, simplemente he estado perdido.
Ahora volveré a West Bend, Colorado, el lugar del que mis hermanos y yo huimos
como el infierno para escapar.
Y ella ha pedido un aventón, River Andrews.
Una j***da estrella de cine.
Este no es un cuento de hadas. No existen los finales felices. Y no soy un j***do príncipe
azul.
Pero, por ella, hay una posibilidad de que pueda serlo.
2. Silas
Tempest
lámame Robin Hood.
Soy una estafadora. Una artista de la estafa.
No robo a los ricos. Me aprovecho de lo peor de lo peor, de las personas que merecen ser estafadas.
Tengo dos reglas, mantente en movimiento y nunca te enamores.
Sólo he pensado en romperlas con un chico. Y ese chico acaba de entrar de nuevo en mi vida, un fantasma del pasado. Silas Saint.
Ahora es un hombre. Arrogante y sexy como la mier**, y seguro que no es la persona de la que me enamoré hace una vida.
Pero cuando me toca, es suficiente para hacer que olvide mi nombre. Él me da ganas de romper todas mis reglas.
Silas
He estado luchando todo el tiempo que puedo recordar. Mier**, creo
que me salí del vientre luchando. Incluso intenté ser legítimo hasta que los problemas me enviaron fuera de Las Vegas y de nuevo a West Bend.
Nunca esperé que un tipo diferente de molestia bailara el vals de nuevo en mi vida, todas las curvas y tatuajes y descaro. Tempest Wilde.
¿Alguna idea de lo que significa "tempestad"? Una j*dida tormenta de viento violenta. Eso es mier** que no necesito.
La amé una vez, hace una vida. Antes de que lo supiera mejor.
El amor es para los tontos, y estoy seguro como el infierno que no lo soy.
¿Pero la forma en que me mira? Me dan ganas de darle todo lo que tengo.
3. Luke
Luke Saint
A la m****a ser bueno. No seré dominado.
Hay tres cosas en la vida en las que soy condenadamente bueno: follando, saltando de aviones y apagando incendios forestales.
¿Establecerme? Sí, claro. Y definitivamente no con alguien como Autumm MayBurn. Es tensa, sarcástica y, demonios, tiene un niño.
¿He mencionado que es diez años mayor que yo? Hay un millón de razones por las que no debo tocarla.
Que se j***n todas esas razones.
La madre soltera con el ardiente y sexy cuerpo y el descaro que iguala al mío, va a ser mía.
Autumm MayBurn
No hay nada en este mundo que desprecie más que un chico malo. Especialmente un exasperante, arrogante y mujeriego chico malo que rezuma sexo por cada poro.
Soy mamá. Una mujer de negocios. Tengo responsabilidades. Lo último que necesito es tener sexo con Luke Saint y que juegue conmigo.
Él piensa que sólo porque me salvó la huerta de un incendio, puede decirme cómo manejarlo.
Cree que sabe lo que necesito, lo que anhelo.
El problema es que creo que podría estar en lo cierto.
4. Killian
¿Una cerca blanca y una familia? No es mi estilo.
Killian
Vivo mi vida según mis propios términos. Eso significa solo. Me gusta mi soledad y eso no va a cambiar.
¿Una mujer como Lily Grant? Sí, correcto. Habla demasiado y tiene demasiadas opiniones. Y su hijo podría ser más sabelotodo que ella.
Si fuera un mejor hombre, me alejaría. Pero una vez que pruebo sus suaves labios, quiero poseer cada centímetro de ella.
La mujer es mía. Incluso si no lo sabe.
Lily
Killian Saint es salvaje e indómito, hosco y solitario, un arrogante solitario de una familia que la gente en West Bend dice que no es buena.
Debería saberlo mejor. Un hombre como Killian podría no tener parte en mi vida, no con un niño que criar y una panadería que dirigir.
Ni siquiera si la manera en que sus manos se sienten, rudas contra mi piel, incendian cada parte de mi cuerpo. Ni siquiera si las cosas sucias que susurra en mi oído me dejan tan al borde que no puedo pensar en nada más que sus labios sobre los míos.
Todo sobre Killian está mal. El problema es que nada nunca se ha sentido tan bien.